PULSO SINDICAL Nº 243 DEL 06 AL 18 DE JULIO
DE 2014
El mes de Julio
tiene varias fechas importantes, que tratamos de no olvidar.
Estuvimos en el
homenaje de la CGT
al natalicio de Luis Emilio Recabarren el 6 de Julio en el Cementerio General y
fue muy interesante escuchar las intervenciones de compañeras y compañeros que
hasta hace poco evitaban hacer uso de la palabra.
Fueron claros,
concretos, pusieron énfasis en lo que hay que hacer, en el esfuerzo que se debe
desplegar para sacar a la clase de la apatía y la desazón.
Es el tipo de
líderes que se necesitan, dispuestos a apoyar en la construcción de una
organización que vaya en apoyo de los trabajadores, conscientes de sus
limitaciones pero esforzándose para minimizarlas y avanzar. Dispuestos a
estudiar y así poder apoyar efectivamente a quienes buscan instrumentos para
terminar con los abusos.
Falta mucho aún
para acercarnos al ideal, pero por lo
pronto va creciendo el número de dirigentes que predican y practican, elemento
fundamental para recuperar la credibilidad de los trabajadores.
Pero el mes tiene,
al menos otras 2 fechas que no debemos olvidar.
Una es el natalicio
de Pablo Neruda (Neftalí Ricardo
Reyes Basoalto) quién nació el 12 de Julio de 1910 y, aunque parezca cliché,
podemos decir que Pablo Neruda está entre nosotros, siempre.
En cada huelga y
movilización del pueblo, en especial las que son reprimidas y desconocidas por
los medios de comunicación. En las tomas de terrenos y demás luchas de los
pobladores que se seguirán sucediendo mientras no exista vivienda digna para
todos. En cada movilización de los estudiantes y demás involucrados en la
exigencia de educación gratuita y de calidad. En las peleas que dan los
empleados públicos por terminar con el contrato a honorarios. En la exigencia de
total verdad y justicia para los
desaparecidos y ejecutados por la dictadura. Apoyando la demanda de hospitales
dignos y de cargo del Estado para atender a toda la población.
Pablo Neruda saluda
con su poesía a cada nuevo sindicato que nace, pues en ellos se refleja la
unión de los explotados que quieren mejorar su futuro, en el trabajo manual, en
los servicios, la pesca, las minas, en las empresas de todas las áreas de la
economía.
El poeta vive en
todas las luchas que se dan en el norte, el sur, el centro de Chile y en el
mundo entero. Camina junto a los jóvenes y a los ancianos, recibe y acaricia
con sus manos los dibujos de miles de pequeños, que en muchos lugares del país
y del mundo le demuestran afecto, en dibujos simples pero llenos de amor, en este
nuevo cumpleaños.
Pablo Neruda nunca estará
en los homenajes sin compromiso ni marchará con los que callan ante las heridas
lacerantes de los más pobres, tampoco reconocerá a quienes dicen honrarlo
mientras negocian de espaldas a este pueblo que tanto quiso y quiere.
Cada año Pablo
Neruda vuelve a nacer entre su pueblo y vivirá eternamente en el.
Entré a una casa de marineros .La madre me esperaba
“No lo supe hasta ayer – me dijo -; el hijo me llamó
y el nombre de Neruda me recorrió como un escalofrío.
Pero, le dije, que comodidades hijo podemos
ofrecerle?”
“El pertenece a nosotros, los pobres – me respondió –El no hace burla ni desprecio de nuestra
pobre vida, el la levanta y la defiende”.
“Yo le dije: sea, y esta es su casa desde hoy”.
Nadie me conocía en esa casa
Del CANTO GENERAL – El
Fugitivo.
Otra fecha que no
debemos olvidar es el 11 de Julio. Fue
este día, en 1971, que el presidente Allende firmó el decreto que nacionalizó
definitivamente el cobre.
Es claro que a
estas alturas del partido casi no va quedando propiedad real del cobre en el
Estado, los mismos trabajadores del cobre en su mayoría se han transformado en
una casta especial y sin embargo sigue siendo importante recordar ese momento,.
Pero, sabemos desde cuando venía esa inquietud de nacionalización? Veamos:
“La lucha por la nacionalización de
nuestras riquezas básicas tiene ya casi un siglo de historia, como testimonia
el artículo publicado el 11 de agosto de 1920, por Luis Emilio Recabarren en el
diario “El Socialista” de Antofagasta:
“Los problemas de la miseria y de la
esclavitud no terminarán mientras tanto la clase obrera se resigne a sufrir la
actual organización social. Nacionalicemos las industrias extractivas.
Nacionalicemos las minas de carbón, las salitreras, los bosques, el cobre, la
agricultura y procedamos a que toda la industria muy nacionalizada sea
administrada bajo el control de comisiones nombradas por el gobierno o las
municipalidades respectivas”.
Años más tarde, en junio de 1932, en la República Socialista
de 12 días de Marmaduque Grove, se produciría el primer intento oficial por
nacionalizar nuestras riquezas básicas, con un decreto que declaraba no sujeto
a concesión al cobre, lo que equivalía a nacionalizarlo, pero un nuevo golpe de
Estado de Carlos Dávila, al amparo de la Armada estadounidense anclada en Valparaíso dejó
inconclusa esta iniciativa.
El primer proyecto de ley de
nacionalización del cobre, que se presentó en el Congreso Nacional, fue
elaborado por los senadores Salvador Ocampo y Elías Lafertte, el 21 de julio de
1951. En este proyecto se disponía la expropiación de las empresas de la gran
minería por el monto de su declaración de capitales que alcanzaba en esa época
a los 53,5 millones de dólares por las tres empresas existentes a la época.
Salvador Allende contempla la Nacionalización de
la Gran Minería
del Cobre, en sus cuatro programas como candidato a la Presidencia de la República, a partir de
1952.
En 1961, los senadores socialistas
Salvador Allende, Raúl Ampuero, Salomón Corbalán, Aniceto Rodríguez, Alejandro
Chelén, Adolfo Quinteros y Galvarino Palacios, presentaron el segundo proyecto
de nacionalización del cobre, mediante el cual se expropiaba a las empresas norteamericanas
según el valor declarado en Impuestos Internos, y se procedía a la creación de la Empresa Nacional
del Cobre, que explotaría los bienes expropiados y comercializaría el cobre.
Este proyecto, como el de Ocampo y Lafertte, nunca fue objeto de mayor estudio
en el Senado.
Pero la lucha por la nacionalización de
la gran minería, dejó de ser una bandera que concernía solo a los partidos de
izquierda, porque parlamentarios de la democracia cristiana e incluso de los
partidos liberal y conservador, también se involucraron en esta lucha, en la
que destacó por su claridad y visión, Radomiro Tomic, quien el 18 de junio de
1961 sostuvo en el Senado:
"Es obvio que mientras pretendamos,
no sólo en lo formal, sino que en lo real, ser un Estado soberano, el control
del cobre debe estar en manos de los poderes públicos del Estado de Chile. Y no
en las empresas extranjeras".
En 1965, en plena discusión de la Ley 16.425 de Chilenización
del Cobre, el senador liberal Julio Von Mühlenbrock, presentaba un proyecto que
disponía la inmediata expropiación de todos los bienes que poseyeran en Chile
las empresas productoras de cobre de la Gran Minería, la que se debía pagar según el
valor libros de la contabilidad.
Esta diversidad de actores políticos que
abogaban por la nacionalización de la Gran Minería del Cobre, desde la izquierda hasta
la derecha, permitió que la gran minería del cobre se nacionalizara por la
unanimidad del Congreso Nacional, el 11 de julio de 1971, fecha que hasta hoy
se conoce como la denominó Allende: Día de la Dignidad Nacional.
Con el ‘Sueldo de Chile’, se lograría la ‘Segunda Independencia’ que permitiría
construir una nueva economía para resolver todos los problemas sociales y
económicos de las generaciones actuales y futuras”.
Esta importante información
es casi desconocida, no se enseña en las escuelas y debieran manejarla todos
los chilenos, particularmente los mas abusados en sus derechos. No solo el
cobre debe volver a manos del Estado, también el agua, la electricidad.
Ojala y no nos
quedemos solo en la conmemoración y trabajemos en serio por recuperar lo
nuestro.
Al cierre unas
palabras para el drama en Palestina.
Horas antes del
cierre de este Pulso un misil había caído en una playa donde jugaban niños
palestinos, terminando con la vida de 4 de ellos. No es solo la perdida de
vidas la que debe preocuparnos, es también una obligación poner en evidencia a
quienes, al mas puro estilo de los nazis, buscar expulsar definitivamente de
sus tierras por la vía del exterminio a los dueños originarios de estas, al
pueblo palestino.
La condena y el
rechazo a la actitud imperialista de Israel, es algo que debemos asumir todos
los que de verdad luchamos por un mundo distinto, mas digno y justo.
MANUEL AHUMADA LILLO
Presidente C.G.T. CHILE