LA ETERNA DISCUSION SOBRE EL INGRESO MINIMO
En Chile, el sueldo mínimo se denomina Ingreso Mínimo Mensual, que es el monto mensual mínimo de la remuneración por una jornada ordinaria de trabajo (que no puede exceder de 45 horas semanales). Es fijado por ley por el Congreso, en base a una propuesta del gobierno acordada con representantes de los empleadores y los trabajadores. Generalmente entra en vigor cada 1º de julio de cada año y dura un año. (Definición tomada de Wikipedia).
Esta definición, tan fría e impersonal, es el mejor reflejo de lo que significa el ingreso mínimo para quienes resuelven sobre él. Nada.
El ingreso mínimo en Chile está establecido en $ 172.000 y así se mantendrá hasta junio del 2011. Es un monto en dinero que no tiene relación alguna con las necesidades de un trabajador y su grupo familiar, y que es fijado en conversaciones entre actores que desconocen absolutamente la realidad de las familias, actores que ignoran el dolor y la desesperanza de miles de hogares que viven con este ingreso.
El monto del llamado ingreso mínimo es piso y techo remunerativo para muchos patrones que, a través de sus organizaciones, presionan permanentemente para que no se dispare, aduciendo como argumentación principal el daño que “un alza desmesurada” puede provocar al empleo. Ninguna persona - y con mayor razón si es el sostén económico de su familia - puede vivir dignamente con esta suma de dinero. Para llegar a esta conclusión no se necesita revisar estadísticas ni tener a la vista variables de todo tipo. Es de sentido común. Algo de lo que parecen carecer el gobierno y los representantes de los empleadores y de los trabajadores que resuelven sobre esto.
La definición de Wikipedia tiene omisiones. No da cuenta de una realidad que crece día a día y que lo seguirá haciendo, en la medida que se impongan normas de flexibilidad y adaptabilidad laboral. El país con el que sueña la patronal no nos sirve a nosotros.
En Chile decenas de miles de trabajadores perciben menos que el ingreso mínimo por un mes de trabajo (ganan menos de $ 172.000). Son hombres y mujeres en su mayoría jóvenes, que prestan sus servicios a tiempo parcial en jornadas de trabajo autorizadas por la ley - 30 o menos horas a la semana - (articulo 40 bis) y por lo tanto no tienen derecho a percibir el sueldo mínimo. Es la misma ley la que autoriza el pago proporcional de éste (inciso segundo del articulo 44 del Código del Trabajo).
Esta clara discriminación continúa. Hay otras tantas decenas de miles de trabajadores que, pese a trabajar mas de 45 horas semanales (ver artículos 27 y 149 del Código que establecen jornadas de hasta 12 horas diarias), reciben muchas veces como único ingreso, el sueldo mínimo fijado por ley, en la actualidad $ 172.000.
Por eso es importante fijar la atención en lo siguiente. Cualquiera sea el valor que este sueldo mínimo tenga a futuro - y mientras se sigan utilizando los actúales parámetros para fijarlo - en caso alguno va a satisfacer las necesidades básicas de alimentación de un grupo familiar. De allí que resulte indignante que algunos se reúnan a discutir cual va a ser el nuevo monto del mínimo, como si éste permitiera dignificar mínimamente a quienes lo reciben.
Los trabajadores deben entender que esta no puede seguir siendo su realidad. Comprender que merecen ganar un sueldo mayor, no solo porque son los constructores de la ganancia sino porque es su familia la que está mal viviendo. Asumir que si no dan la pelea por cambiar el criterio existente, los futuros perjudicados serán sus hijos y los hijos de estos.
Bueno, vamos a hacer un ejercicio para probar nuestra afirmación, ejercicio que cada trabajador puede hacer desde su propia realidad. El resultado será lapidario.
Se dice que un hogar está en situación de pobreza cuando tiene ingresos inferiores al mínimo establecido para satisfacer las necesidades básicas de sus miembros.
Se ha establecido que para noviembre del año 2009 una canasta básica de alimentos para una persona tiene un valor de $ 64.134 y si hacemos aplicación de IPC entre Noviembre 2009 y Abril de 2011 (3, 5%) la canasta tendría un valor de $ 66.379.
Por último que un hogar tiene como promedio 4,04 miembros.
O sea, ese hogar promedio para no estar en situación de pobreza necesita mensualmente:
$66.379 X 4,04 = $ 268.171 (valor liquido) . Si aplicamos al valor liquido al que hemos llegado un recargo del 20 % (AFP; AFC y Salud), una familia necesitaría al mes $ 321.805, solo para no estar en situación de pobreza.
Desconozco todas las faramallas que hacen los estudiosos para medir la pobreza, pero tengo claro que ninguno de los que habla de pobreza es pobre, por lo que no están muy preocupados de averiguar como diantres lo hace una familia para vivir con el ingreso mínimo que graciosamente fijan de año en año.
Si quiere alguien conocer los productos que componen la canasta básica de alimentos solo debe ir a la pagina www.mideplan.cl y se llevará mas de una sorpresa como por ejemplo constatar que no puede consumir mas de 3 panes diarios por persona, algo mas de un kilo de arroz al mes, 300 gramos de lentejas, por nombrar solo 3 de los productos que contiene la canasta.
Ahora, si usted y su grupo familiar tienen en cuenta que no viven en el aire y que hay otras necesidades que satisfacer, siguen aumentando los $$ que debe tener mensualmente. Agregue - como mínimo - los siguientes gastos:
Locomoción 2 pasajes diarios $1.100 X 26 días = $ 28.600
1Cilindro de Gas de 15 Kg. $ 15.000 (y en alza)
Dividendo mínimo $ 80.000 (Si arrienda el valor sube).
Luz $ 15.000.
Agua $ 10.000.
TOTAL $ 148.600
Entonces: Canasta básica $ 321.805 + Otros gastos $ 148.600. A Mayo del 2011, una familia de 4 miembros necesita para el mes $ 470.405.
Es harta plata pero, ¿que pasa si son menos en la familia? Dirá alguien. Veamos. Si son 2 personas necesitan $ 281.358 al mes y si es solo el trabajador son $ 214. 979.
Y quede constancia que no se han considerado gastos como teléfono, mensualidad escolar, vestuario, asistencia médica y un mínimo de recreación.
¿Sirve de algo entonces la tan cacareada discusión sobre el monto del ingreso mínimo?
La respuesta es una sola. NO SIRVE DE NADA.
Por eso tenemos un desafío grande por delante, hay que recuperar la capacidad de discernir y concluir que nos han estado engañando sin asco. Poniendo en primer lugar temas que no son los más importantes.
Sin trabajadores las empresas no funcionan, tenemos derecho a aspirar a la repartición de las utilidades que generamos. No mas ingreso mínimo, si SUELDOS JUSTOS.
MANUEL AHUMADA LILLO
Presidente CGT CHILE